Leire Sopuerta Biota. Madrid
El Grupo Parlamentario de Senadores Nacionalistas ha presentado una moción en el Senado por la que insta al Gobierno a que, mediante ley, se regule la profesión de quiropráctico conforme a la definición de la Organización Mundial de la Salud.

Pérez Bouza, del BNG.

Además, la iniciativa solicita que se redacte un plan de estudios para adquirir el título universitario de quiropráctico, por el que, “además de las materias que el Gobierno imponga, se recogiera las establecidas en algunos programas de estudios superiores de quiropráctica ya implantados como puede ser el título de Real Centro Universitario El Escorial-María Cristina, centro adscrito a la Universidad Complutense de Madrid”, donde los cursos tienen una duración de cinco años y están definidos como estudios de enseñanza superior, con un mínimo de 4.200 horas.

Los nacionalistas recuerdan que en Europa esta profesión está reconocida y regulada en la legislación de todos los países, excepto Grecia, Luxemburgo y España.

Esta situación, denuncian en su exposición de motivos, “produce graves consecuencias para el ejercicio de la profesión y perjuicio a los enfermos”. Además, de “facilitar intrusismo, ya que las personas que no tienen título ni formación sobre el tema se dedican a su práctica, con el consiguiente perjuicio para los pacientes”. Otro de los inconvenientes es que “queda en entredicho” la libre circulación de trabajadores, un “principio básico en la Unión Europea”.